Rock con identidad nacional
Uno de los puntos de inflexión en el desarrollo del rock chileno, ha sido la discusión acerca su identidad. ¿Se puede hablar de rock chileno, o meramente de rock en Chile? Si lo reconocemos como experiencia social, esta manifestación en nuestro país contiene todos los elementos propios de su sociedad: público, espacios de interpretación en vivo, dinámica histórica propia.
Sin embargo, en cuanto a propuesta musical, esta música inicialmente era una mera imitación de la música extranjera, en todos los aspectos. El real perfil del rock como música representativa de la sensibilidad chilena y latinoamericana, se inició con Los Jaivas. Fueron ellos quienes incorporaron a este nuevo ritmo instrumentos autóctonos, como trutrucas, cultrunes, quenas, etc; ritmos originarios, como cuecas y malambos; y temática propia, donde la canción "Indio hermano" es un buen ejemplo. Su disco Alturas de Macchu Picchu, musicalización de poemas de Pablo Neruda, grabado en 1981, fue uno de los mejores ejemplos.
En la misma línea, numerosos conjuntos demostraron la capacidad del rock, como experiencia artística, de reflejar la propia realidad chilena y continental. Los Blops, por ejemplo, hicieron trabajos en conjunto con Víctor Jara y con Ángel Parra, reconocidos músicos folclóricos chilenos; Congreso, conjunto de larga trayectoria que grabó su primer disco el año 1972, incorporó paulatinamente elementos latinoamericanos en su propuesta. En los años 1980 el conjunto Sol y Medianoche, interpretó cuecas y música de Violeta Parra al ritmo del rock. En los años 1990, el grupo Los Tres incorporó a su repertorio permanente la cueca urbana cultivada por Roberto Parra.
Pero no sólo el sonido. Las letras fueron haciéndose cada vez más representativas de la realidad chilena. El idioma español desplazó definitivamente al inglés de los inicios, y la contingencia tuvo su expresión efectiva con grupos como Los Prisioneros, que cantaron sobre los jóvenes, los pobladores o el machismo.
El rock ahora forma parte de la historia social y cultural chilena, y es manifestación vigente de su contemporaneidad.